lunes, 16 de noviembre de 2015

Pensamientos 1

Como el sol cuando se esconde cada atardecer, iluminando el horizonte lejano, mis miedos se van cuando estoy junto a ti. Sentirte cerca, a mi lado, abrazando mi cuerpo y mi alma mientras con una simple sonrisa vences mis mas oscuras pesadillas. El silencio nos envuelve como un manto de calor, disfrutando del mágico momento en que el día se para justo antes del anochecer. Sin hablar; sin necesidadde un "te he echado de menos" o cualquier otra frase que salga de nuestros labios. Porque no se necesitan palabras cuando el corazón es el que habla, porque me entiendes tan bien que sabes con mi mirada lo que quiero decirte sin expresarlo en voz alta. Porque somos almas viejas en estos cuerpos que nos albergan y, por fin, después de tanto tiempo, hemos vuelto a reencontrarnos...